Alemania cambiará completamente su matriz energética
Berlín aspira a transformar de arriba abajo su sector energético, “apagar” la nuclear, reducir emisiones y zambullirse en las renovables, y todo sin lastrar los precios, poner en riesgo el suministro o deteriorar su competitividad económica.
La canciller alemana, Angela Merkel, explica hoy ante el Bundestag (cámara baja) este proyecto personal que lanzó en su anterior legislatura, tras la catástrofe atómica de Fukushima, y que acaba de situar como el “problema principal” que va a afrontar su nuevo gabinete de gran coalición.
Esta calificación implica reconocer la complejidad legal, política y económica de la iniciativa, cuyo éxito pasa por ejecutar ingentes inversiones públicas en infraestructuras e investigación, desmontar un ciclópeo sistema de ayudas públicas, contener la explosión de costes que irrita a consumidores y empresas del sector, y atender a las críticas de ecologistas y la oposición.
Merkel indicó recientemente que los vectores políticos sobre los que debe articularse este cambio radical deben ser la “seguridad en el suministro”, la “estabilidad de los precios” de la electricidad y la “protección medioambiental”, pero el diablo está en los detalles.